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En 2019 CropLife Latin America participó en el quinto Congreso de la Asociación Latinoamericana Anticontrabando (ALAC) en Costa Rica, para sensibilizar a autoridades y asistentes sobre el impacto negativo del comercio ilegal de plaguicidas. Representantes de organizaciones que combaten el comercio ilegal, como la Alianza Transnacional para Combatir el Comercio Ilícito, (TRACIT); la Policía Rodoviaria y la Policía Federal de Brasil; la Oficina de Patentes y Marcas de los EEUU (USPTO), el Instituto Brasileño de Ética Competitiva (ETCO),cámaras de comercio de la región, entre otras, analizaron temas críticos como el crecimiento de las bandas criminales y su accionar, particularmente en la Triple Frontera (Brasil, Paraguay y Argentina), la necesidad de mejorar la colaboración regional para desarticularlas, e impulsar un aumento de las penas para los delitos asociados al comercio ilegal.
Además de esta iniciativa latinoamericana, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó la Guía de Mejores Prácticas para Identificar el Comercio Ilegal de Plaguicidas. Se trata de 105 puntos que pueden servir como una lista de chequeo para implementar un programa nacional contra el comercio ilegal. La guía incluye prácticas de fiscalización, desde la fabricación, hasta la formulación, el comercio, uso y la destrucción final de los productos ilegales.
La Guía de la OCDE contiene 105 puntos para frenar el COMERCIO ILEGAL de plaguicidas que pueden convertirse en una hoja de ruta para diseñar estrategias nacionales que combatan este delito. CropLife Latin America ha promovido esta guía en México, Colombia, Argentina, Chile y Paraguay. En 2020 continuaremos llevando los contenidos de esta guía de la OCDE, que se complementa muy bien con el reporte de la Agencia de Naciones Unidas contra el Crimen Interregional (UNICRI) publicado en 2016, asegura Javier Fernández, Director de Asuntos Regulatorios de CropLife Latin America.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) en Argentina firmó un acuerdo con Mercado Libre para controlar la venta ilegal de agroquímicos en línea. Esta gestión fue apoyada por la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes, CASAFE y CropLife Latin America. Para facilitar el control se diseñó una plataforma en donde aparecen los productos que no pueden comercializarse en línea. Cuando el sistema detecta uno de estos productos, envía una alerta al Senasa y lo da de baja. En Argentina este control se realiza también para medicamentos y productos veterinarios.
CropLife Latin America con la Asociación de Proveedores de Insumos Agropecuarios, APIA, en alianza con el Instituto Boliviano de Comercio Exterior, IBCE, organizaron este foro en donde se presentaron los resultados de un estudio, “Comercio Ilegal de Plaguicidas en Bolivia”, que evidencia que más del 14% de las importaciones de agroquímicos corresponden a plaguicidas ilegales, falsificados y adulterados.
“Bolivia se caracteriza por importar plaguicidas de diversos países, siendo el 63% destinado al sector agropecuario, 25% al comercio, 11% a la industria y 1% a otras actividades. Particularmente zonas agrícolas en Santa Cruz, Cochabamba y Tarija, se inundan de plaguicidas falsificados peligrosos para la salud, generando elevadas pérdidas económicas para el productor agropecuario y un severo daño al medio ambiente”, aseguró el economista Gonzalo Vidaurre, autor del estudio “Comercio Ilegal de Plaguicidas en Bolivia”.
En el Foro se hizo un llamado a las autoridades para mejorar la normativa y los controles actuales para combatir el comercio ilegal de plaguicidas.
Es preocupante la falta de normativas que controlen el comercio informal de plaguicidas en el área rural de Bolivia. Cero tolerancia a la falsificación, ilegalidad y contrabando fue el llamado del presidente de APIA, Juan Mario Rojo, quién enfatizó que“la importación, venta y comercialización de los plaguicidas que no cuentan con un Registro Fitosanitario son ilegales, toda vez que los mismos no han sido sometidos a ninguna norma de seguridad en laboratorios acreditados, que certifique la calidad, eficacia y eficiencia de los insumos, haciendo de esto una peligrosa amenaza para la salud del agricultor, la cadena alimenticia, el medio ambiente y la economía”.
Este Manual desarrollado por Procultivos-ANDI con el apoyo de CropLife Latin America está dirigido a la cadena de comercialización de plaguicidas y busca sensibilizar a los empresarios del sector para que participen activamente en la lucha contra este delito, ya sea denunciando penalmente a la bandas criminales o adelantando acciones preventivas. El Manual explica cuáles son las leyes y los artículos que el comercio ilegal de plaguicidas incumple según el Código Penal colombiano, son delitos contra la salud pública, contra el orden económico y social, y contra la seguridad pública.
